No hay mejor satisfacción que ver nuestras casas organizadas, ¿cierto? Y más ahora que estamos encerrados y vemos TODO. Además, para muchas, el hecho de no tener regueros nos da paz y tranquilidad mental. Y si a eso le añadimos nuestra nevera y freezer, uff, más felices aún, pues esto hace que hasta preparar nuestras comidas sea una experiencia mucho más agradable. Imagínate en estos tiempos saber con lo que cuentas y maximizarlo, ya que sabemos que debido a esta pandemia que estamos viviendo a nivel mundial no conseguimos todo lo que estamos acostumbrados en los supermercados. Por ello, queremos hacerte la vida más fácil y te damos unos tips que te ayudarán. Por supuesto, improvisa y encuentra un sistema que se adapte mejor a tu estilo de vida. Una vez que lo hagas, te darás cuenta de que no solo estás ahorrando dinero, sino que te sentirás más relajada cada vez que acudas a tu cocina para crear incluso la comida más simple.
https://www.instagram.com/p/B86gS-Sp4Uu/
Alimentos frescos: Es importante saber que las frutas y vegetales deben ir en los cajones de abajo que es la parte más fría del refrigerador. Los contenedores están diseñados para mantener este tipo de alimentos a una temperatura específica y así se conserven más tiempo. Mientras que las carnes y los pescados frescos que no vayas a congelar, son los alimentos más delicados, por ende deben ir en la zona más fría, es decir, la que queda encima del cajón de las verduras. Por decirlo así la penúltima de abajo hacia arriba. Evitarás que puedan producirse goteos de sus jugos a otros alimentos y no hayan bacterias.
Mason jars: Ok, hands down! Esto es la mejor invención para almacenar, pues aquí puedes guardar arroces, cereales, pastas, granos, semillas, nueces, etc. Lo bueno es que están disponibles en una variedad de tamaños y colores para que puedas encontrar estilos para satisfacer cualquier necesidad de almacenamiento. Aparte de que se ven súper trendy.
Envases de cristal con su tapa de silicón: Estos envases son excelentes, primero ves el contenido, puedes hasta ponerle etiquetas y organizarlos por categoría y prolongan la vida de los alimentos. Son ideales para guardar frutas, verduras, guisos de carnes o habichuelas, sopas, pastas, sobras de comida que quieras congelar o recalentar. Lo bueno es, que si lo guardas por porciones, ese mismo envase, lo sacas y lo metes directo al microondas y listo.
Bolsas Ziploc de freezer: Bien importante, deben decir de freezer porque tienden a ser más resistentes, no se rompen. Son ideales para guardar frutas en el freezer o para poner el contenido de smoothies. Por ejemplo algo que me sirve a mí, es hacerlo por las medidas justas para un batido: pongo kale, espinaca, guineo y piña y lo echo en el blender y al momento le añado leche de almendra o agua de coco, una cucharada de espirulunia y semillas de chia.
Un consejo: Este no es el momento de botar las frutas que veas maduras y magulladas. Córtalas y congélalas, estas son las ideales para smoothies. La fruta se mantendrá fresca en el congelador durante tres o cuatro meses.
Además, en estos momentos lo ideal es almacenar carnes, pollo o pescado en tu freezer. Puedes congelarlos sin ningún problema, pues duran hasta cuatro meses. Etiquétalos con el contenido y la fecha de empaque y de expiración.
Las bandejas de cubitos de hielo de silicona: Estos son excelentes para congelar el caldo de pollo o carne para hacer sopas o salsas aromatizantes y darles un toque a tus guisos o arroces. Además son un must para poner el sofrito pues así tienes la medida perfecta y también para hacer cubitos de hielo de café o té, que puedes usar para helar tu propio café o té de la mañana para que no se llenen de agua y la consistencia y sabor sean perfectos.
Congela tus panes: Una vez compres el pan y sabes que no te lo vas a comer de inmediato, congélalo, así se mantendrá fresco y te durará meses. Puedes comprar como seis paquetes y almacenarlos. Igual, no importa cuán deliciosos sean tus pancakes o waffles, ocasionalmente hay sobras. Estos son ideales para congelar para cuando no te de tiempo, los sacas del freezer los calientas y los tienes de inmediato. Créeme, resuelven, sobre todo si tienes hijos.