Periódicamente, revisamos el tratamiento de estas afecciones acorde con factores como el desarrollo de nuevos medicamentos, la aparición de nuevos datos referentes a medicamentos ya conocidos y la información obtenida de nuevos estudios clínicos. Como ejemplo, las nuevas guías de hipertensión de la Asociación Americana del Corazón fueron publicados en el 2019 y establecieron 120/80 mmHg como la presión normal.
Sin embargo, en presencia de desastres naturales como el huracán María y los temblores ocurridos recientemente en Puerto Rico, sabemos que muchas veces nuestros pacientes dejan de estar controlados por un sinfín de factores. En estas condiciones extremas puede haber niveles de ansiedad altos, pobre acceso a salas de emergencia y hospitales, escasez de medicamentos, falta de descanso y cansancio extremo. Todos estos factores van a llevar al descontrol de la presión con su correspondiente riesgo de complicaciones. Sabemos, por análisis estadísticos, que durante estos desastres naturales, complicaciones como derrames cerebrales y ataques del corazón, relacionadas a la hipertensión, pueden aumentar considerablemente. Estas complicaciones pudieran ser evitadas si se tuviera un mejor control de la presión antes, durante y después de estos desastres.
Recomendaciones para controlar el nivel de presión durante situaciones extremas:
- Mantén siempre a la mano los medicamentos para la presión. Es recomendable también tener algunas dosis de los medicamentos en el carro en caso de no poder regresar a la casa. De no tener los medicamentos contigo, ten a la mano una lista con los nombres y las dosis de los medicamentos. Puedes usar el celular para guardar la lista.
- Conoce las clases principales de los medicamentos para la presión. Si no consiguieras el medicamento que utilizas, podrías recibir otro de la misma clase. Algunos de los más usados son:
- Desarrolla un estilo de vida saludable evitando el exceso de sal y de grasas en la comida.
- Establece períodos de descanso durante el día y entre siete y ocho horas de sueño diario.
- Trata de mantener la calma y controlar la ansiedad. Cuando estamos ansiosos, nuestro cuerpo segrega adrenalina y otras sustancias que resultan en un aumento del pulso y de la presión. Técnicas para el manejo del estrés, como la meditación y la oración pueden ser de gran ayuda. Muchas veces la ayuda psicológica profesional es necesaria.
- Hidrátate y toma agua. Mantente en lugares ventilados y no expuestos directamente al sol. Si tomas diuréticos para el control de la presión, es importante revaluar tu necesidad en estas nuevas condiciones.
- Si monitoreas tu presión arterial con monitores caseros, ten en cuenta que estas medidas no son muy exactas teniendo un factor de error de 10 mmHg en la presión sistólica. Debes tomar tu presión sentada por lo menos cinco minutos, con ambos pies en el piso y no haber comido ni fumado por 30 minutos. Es aconsejable siempre cote- jar estas medidas con algún profesional de la salud.
- Las personas sin hipertensión previa que desarrollan alta presión en situaciones extremas, muchas veces necesitan medicamentos para su control. Sin embargo, muchas de ellas normalizan sus presiones una vez la situación de desastre ha terminado. Se recomienda dar seguimiento a estos pacientes con tomas de presión por dos o tres meses.
Esperamos que mediante la aplicación de estos consejos y las recomendaciones de los médicos, podamos llegar a nuestro objetivo que es disminuir las complicaciones y la mortalidad relacionadas a la hipertensión, que ya fue vista en desastres como el huracán María.
La autora es cardióloga, con práctica privada en Humacao. (787) 850-1720 y (787) 852-4275