El afeitado perfecto es una combinación de arte, ensayo y error. Eso afirmó el doctor Robert Anolik, profesor clínico asistente de dermatología en la Facultad de Medicina de la Universidad de Nueva York, quien ofreció varios consejos para asegurar un afeitado de primera.
El primer paso es mojar la piel y el pelo para suavizarlo. Anolik expresó que el momento ideal para afeitarse es inmediatamente después de una ducha, cuando la piel está tibia, húmeda y libre del aceite excesivo y células de piel muerta que pueden obstruir la afeitadora.
Lo siguiente es usar una crema de afeitar que haga espuma. Si tu piel es muy seca o se irrita con facilidad, elige una para piel sensible.
“Haciendo un movimiento circular, aplica una pequeña cantidad de crema en la cara con los dedos o un cepillo de afeitar. Un cepillo de afeitar puede ayudar a levantar los vellos para untarles la crema de afeitar de forma más pareja”, apuntó. Espera dos o tres minutos para dar tiempo a que la crema haga su efecto y entonces empieza a afeitarte en la dirección en que crece el vello facial. Esto ayudará a evitar la irritación por la afeitadora, aseguró. Tras cada pase con la afeitadora, enjuágala.
Cuando termines de afeitarte, lávate la cara con agua fría para aliviar la inflamación y aplícate un humectante con un FPS de 30 o más.
Otros consejos:
- Entre afeitadas, verifica que la afeitadora se seque completamente para prevenir el desarrollo de bacterias. Guárdala en un lugar seco.
- Cambia la navaja de afeitar o bota las desechable después de entre cinco y siete afeitadas.
“En algunos hombres, las máquinas con navajas múltiples pueden hacer el trabajo demasiado bien, o afeitar demasiado cerca de la piel. Pruebe a utilizar una afeitadora de una o dos navajas y no estires la piel mientras te afeitas”. Si usando la técnica adecuada, de cualquier forma experimentas irritación por la navaja o el vello subcutáneo, considera cambiar de navaja.
Recuperado de Health Day
Foto: Felipe Torres
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