Aunque el yoga es una antigua disciplina, este ha ido evolucionando con el tiempo y se han desarrollado nuevas prácticas. Una de ellas es el programa de yoga aérea, que ofrece todos los beneficios de relajación del yoga, pero añade un columpio y la fuerza de la gravedad para retar y fortalecer el cuerpo.
“Todo lo que haces en un gimnasio, a nivel de ejercicio físico, lo puedes conseguir con la yoga aérea; fuerza, flexibilidad y resistencia”, explica la instructora de yoga y dueña de Samadhi Yoga Institute, Lizelle Arzuaga.
El programa de yoga aérea o yoga restaurativa de suspensión, como también se conoce, fue creado y diseñado en Puerto Rico en el 2006 por Arzuaga junto a la aerealista e instructora de yoga María de Azúa.

Aunque la yoga restaurativa de suspensión utiliza pranayama, aromaterapia y posturas de la yoga terrera, se diferencia por emplear un columpio como su herramienta principal.
El columpio aporta una gran cantidad de beneficios a la práctica del yoga ya que permite hacer fácilmente poses que te tomarían años lograr en el piso, desarrolla confianza para estar invertido, puedes aguantar las diferentes asanas por más tiempo, y obliga al cuerpo a hacerlas correctamente.
Además, el mecer constante del columpio, ofrece un apoyo emocional, mental y anímico que tranquiliza y estabiliza a la persona. “La yoga aérea no es una postura o un grupo de posturas en particular, sino la posibilidad que te da el aparato de ayudar a la gente”, aclara Arzuaga.
“Es uno de los estilos de yoga que más rápido cambia tu cuerpo y mente”, reitera Arzuaga porque el yoga aérea trabaja todo el cuerpo de una manera gentil pero efectiva. Otros beneficios físicos son la tonificación de los músculos y el aumento de la flexibilidad. Además, mejora la circulación de la sangre, y el estirar y descomprimir el cuerpo.
Es una disciplina amplia que te da la opción de hacer la clase a diferentes alturas, dependiendo de tu preferencia o del tipo de clase. “Se puede hacer con los pies en el piso, lo que te obliga a que caigas en un alineamiento automático por la gravedad del columpio, o puedes hacer los ejercicios en el aire, que es más difícil porque requiere que trabajes otros músculos”, explica Arzuaga.

Cualquier persona puede practicar la yoga restaurativa de suspensión ya que existen tres niveles de yoga aérea con diferentes intensidades y objetivos. La yoga aérea terapéutica es ideal para personas con lesiones, sobrepeso, artritis y distintos padecimientos. Es la clase básica para las personas que buscan trabajar su flexibilidad. La vinyasa aérea, o la clase avanzada, es más una clase de fitness que funciona para trabajar con el tronco y la parte superior del cuerpo.
Ya que el programa de yoga aérea es una marca y un programa exclusivamente de Samadhi Yoga, este es el único lugar donde puedes tomar las clases. Para más información, puedes acceder a su página digital o visitar su página de Facebook.
Fotos: Juan José Rodríguez / LMH