¿Alguna vez has escuchado a alguien decir que el síndrome premenstrual (SPM) es una “changuería” de las mujeres? ¿Te has preguntado qué hay de cierto en esa afirmación?
Para el ginecólogo obstetra Gonzalo Vázquez, se trata de un planteamiento totalmente irresponsable. Explicó que el SPM es un desorden reconocido y descrito desde 1953 y que este tipo de comentarios “hace que las pacientes eviten expresar su situación y la afección sigue empeorando, lo que perjudica toda la vida de esta persona y la de los que la rodean”.
No comunicar esta situación al especialista en salud, por parte de la paciente hace que el inicio de la terapia sea procrastinado en muchas ocasiones, añadió.
En términos médicos, el SPM es un grupo de síntomas físicos y de comportamiento, que ocurren en la segunda mitad del ciclo menstrual (luego de la ovulación) y suelen interferir con el trabajo y las relaciones personales. Los síntomas desaparecen en la segunda mitad del ciclo, que comprende desde ovulación hasta el comienzo de la menstruación.
Se estima que el SPM afecta a entre un 5 a un 95% de las mujeres en edad de menstruación. Alrededor de 40% de ellas se afectan significativamente, mientras que solo del 2 al 3% tienen síntomas severos entre las edades de 18 a 48 años.
Vázquez sostuvo que usualmente el tratamiento consiste de medicamentos combinados con modificación de hábitos y conducta. Sin embargo, subrayó que el tratamiento debe ser individualizado y dirigido a los síntomas más incapacitantes.
El tratamiento es sintomático, comenzando con un descanso adecuado, sueño regular y ejercicio. Aunque no hay evidencia científica que lo apoye, se cree que el té de tilo ayuda para relajación y el de anís estrellado para la distensión abdominal. También se están estudiando los efectos del yoga.
Otras recomendaciones del NIH son:
- toma un complejo multivitamínico cada día que incluya 400 microgramos de ácido fólico y uno de calcio con vitamina D, ya que este puede ayudar a mantener los huesos fuertes a la vez que alivia algunos síntomas del SPM.
- Ejercítate regularmente y come alimentos sanos, incluyendo frutas, verduras, y cereales integrales.
- Evita la sal, alimentos con azúcar, cafeína, y alcohol, especialmente cuando estés teniendo síntomas de SPM.
- Duerme lo suficiente, tratando de lograr dormir 8 horas cada noche.
- Encuentra formas sanas de sobrellevar el estrés. Habla con amigos, haz ejercicio, escribe en un diario o ¡dibuja!
- No fumes. Medicamentos sin receta para el dolor como ibuprofeno, aspirina, o naproxen pueden ayudar a aliviar los calambres, dolores de cabeza, dolores de espalda y sensibilidad de los senos.