HONOLULU, Hawaii — Mientras el virus del zika se arraiga en Latinoamérica, investigadores a miles de millas de distancia en Hawaii emplean datos para averiguar cuál será el próximo lugar donde se expandirá.
En los últimos tres meses, investigadores de la Universidad de Hawaii en el Pacific Disaster Center se han centrado en combatir el zika. En años anteriores, el centro ayudó a agencias como el Departamento de Estado de Estados Unidos y el Departamento de Seguridad Nacional a reaccionar a desastres como el terremoto de 2015 en Nepal o el ciclón tropical Winston que barrió Fiyi el mes pasado.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró recientemente el zika como “una emergencia de salud pública de preocupación internacional”. Los investigadores en Hawaii trabajan para recoger datos y mapear el posible avance del virus.
Se han registrado brotes de zika en 41 países, y el virus se ha vinculado a una malformación de nacimiento.