La disfunción eréctil (DE) se define como la inhabilidad de tener una erección lo suficientemente fuerte como para tener una penetración sexual. Aunque hasta hace unos años afectaba principalmente a hombres mayores de 40 años, en tiempos recientes se ha observado un aumento de casos en jóvenes, según un estudio de Boston Medical Group.
Diferentes investigaciones muestran que los sujetos con disfunción eréctil menores de 40 años representan aproximadamente una cuarta parte del total de la población que acude a consulta por este problema. De hecho, la DE es más severa en los hombres jóvenes que en los mayores y está recibiendo mucha atención por parte de los investigadores y profesionales correspondientes.
De acuerdo con los hallazgos de Boston Medical Group, el alcohol es la principal causa de los problemas de disfunción eréctil de los hombres entre 18 y 40 años, con un 60% de los casos registrados. El alcohol es depresor del sistema nervioso central, por lo que retarda la respuesta sexual en los individuos que lo consumen. Esto sucede tanto en el bebedor ocasional como en el habitual, ya que es consecuencia directa de una ingesta excesiva de alcohol, indicaron los investigadores.
Otras causas de la DE en jóvenes son el consumo de tabaco (35%) y drogas ilegales. Algunos investigadores confieren relevancia también a la obesidad, relacionada con los problemas cardiovasculares, algunos de los cuales se manifiestan con la disfunción eréctil en jóvenes. También se deben tener en cuenta factores de orden psicológico como el estrés y las presiones propias del actual estilo de vida.
En cuanto al tratamiento, el urólogo Juan Jesús Medina Tirado señaló que existen medicamentos para ayudar a tener una erección la cual la persona pueda entender que es satisfactoria para tener su actividad sexual completa.
“Los medicamentos que se toman para la disfunción eréctil lo que hacen es una vasoconstricción de los tejidos del pene para que cree una obstrucción venosa, atraiga sangre hacia el pene y esta permanezca un tiempo más prolongado dentro de este. De esta forma la persona puede tener su erección y relación sexual”, explicó.
Sin embargo, la persona debe ir al médico para que él determine si es candidato para tomar dicho medicamento.
Según el urólogo, esto es muy importante debido a que estas pastillas para la disfunción eréctil causan reacciones distintas en cada persona. Además, si una persona toma el medicamento y está preocupado por lo que le pueda ocurrir, como que se va a morir o que le causó dolor de cabeza, el fármaco no funcionará.
Por otro lado, expresó que otra alternativa de tratamiento son las “famosas bombitas para que la persona pueda tener una erección, aunque sea artificial, pero puede tener penetración y lograr su orgasmo”, indicó.
La disfunción eréctil es una enfermedad que requiere atención y paciencia para sobrellevar y superar. Tener un estilo de vida balanceado y saludable y prevenir los factores descritos, favorecerá la vida sexual de muchos jóvenes.
Cuidarse siempre es la mejor prevención.
“Es importante que las personas se chequeen preventivamente con su médico primario. La literatura dice que puede empezar tan temprano como a los 20 años y terminar a los 80”.