Cuando menos te lo esperes, te puede tocar a la puerta la difícil encomienda de buscar un hogar de cuidado para alguno de tus padres u otro ser querido.
Con frecuencia esto puede suceder cuando un ser querido está en el hospital con un problema de salud o una lesión médica grave. Aunque no nos imaginamos en esta situación, que puede surgir de sorpresa, sí puedes planificar con anticipación visitar varios hogares de cuidado y evaluarlos para facilitar el proceso de selección. Recuerda que es, primeramente, un recinto que debe ofrecer alimentación, enfermeras especializadas, rehabilitación, servicios médicos, cuidado personal y recreación en un ambiente supervisado y protegido. De la misma forma, nunca podemos olvidar respetar la dignidad e independencia de esa persona que amamos, aunque necesite apoyo.
Evalúa al menos tres
Solamente tú puedes ser el juez de cuántos hogares de cuidado debes visitar antes de elegir, pero trata de evaluar al menos tres para hacer comparaciones. Si es posible, pídele al mismo familiar que estará viviendo allí y a otros miembros de la familia que te acompañen para hacer las visitas antes de tomar una decisión.
Hacer las visitas te dará la oportunidad de ver cómo es realmente el cuidado en la institución; podrás hablar con el personal, los residentes y otros familiares, probar la comida y observar las instalaciones. Siempre es mejor ir a los lugares por lo menos dos veces. Haz una de las visitas sin avisar, durante el fin de semana o por la noche que es cuando los problemas de personal son más notorios. También debes indagar sobre el tipo de cuidado que tu ser querido necesita, para asegurarte deque la instalación pueda ofrecerlo.
Considera seriamente la ubicación
Un detalle fundamental a la hora de elegir un hogar es la ubicación. Trata de encontrar uno que sea accesible para que puedan visitar la familia y las amistades, ya que esto será clave para la felicidad de tu ser querido. Además, por lo general las personas que viven en hogares reciben mejor atención del personal si tienen visitas regularmente. Aprovecha tus visitas para observar todo cuidadosamente y no ignores tus sentimientos y corazonadas porque a menudo te pueden alertar si algo no anda bien.
Lo que debes cuestionar
Para que tomes una buena decisión, a continuación te ofrecemos una lista de cotejo con preguntas que debes hacer y detalles para verificar antes de elegir un hogar.
Lo básico
- La instalación, ¿está certificada por Medicare y Medicaid?
- ¿Le han revocado la licencia alguna vez?
- ¿Está aceptando nuevos pacientes o existe un periodo de espera para la admisión?
- ¿Se revisan los antecedentes penales de todo personal?
- ¿Cuántas enfermeras graduadas se encuentran de guardia en cada turno?
- ¿Cuál es la proporción de personal por pacientes?
- ¿Cuál es la política de salida de la instalación?
- ¿Existe transporte disponible para que el residente pueda ir a su médico?
- ¿Están claras las horas de visita?
- ¿Hay reuniones de planificación de cuidado durante horas accesibles a los miembros de la familia?
Seguridad
- ¿Hay buena iluminación en las escaleras y en los pasillos?
- ¿Están bien marcadas las salidas?
- Los pasillos, ¿tienen pasamanos?
- ¿Cuentan con barras de apoyo y botones de llamada las habitaciones y los baños?
- ¿Hay cerraduras de seguridad en las puertas y ventanas?
- ¿Tiene sistemas de seguridad contra incendios?
- ¿Hay planta eléctrica y cisterna en caso de emergencia?
- ¿Es fácil de seguir el plano de la instalación si hay que hacer una evacuación en caso de emergencia?
Asuntos de cuidado
- ¿Huele bien la instalación?
- ¿Están limpios y bien arreglados los residentes?
- ¿Interactúa bien el personal con los residentes?
- ¿Participan los residentes en actividades y ejercicios?
- ¿Tienen a los mismos cuidadores los residentes diariamente?
- El personal de ayuda, ¿responde rápidamente?
- ¿Hay agua limpia disponible en las habitaciones?
- ¿Se ve y huele bien la comida?
- ¿Se les ofrece selección de alimentos a los residentes a las horas de comida?
- ¿Están recibiendo ayuda los residentes que necesitan apoyo para comer o beber?
- ¿Hay entremeses nutritivos disponibles durante el día y la noche?
- ¿Hay terapia física durante todo el tiempo que necesite el residente?
- ¿Tiene capacitación especial el personal para lidiar con personas que sufren demencia?
- ¿Existen servicios o programas especiales para atender las necesidades especiales de personas con alzhéimer?
Calidad de vida
- ¿Están a la vista los derechos de los residentes?
- ¿Toca a la puerta el personal antes de entrar en la habitación de un residente?
- ¿Están cerradas las puertas cuando se viste o baña a un residente?
- ¿Es fácil que la familia o amigos visiten en la instalación?
- ¿Cumple el hogar con las necesidades culturales, religiosas o de lenguaje de los adultos mayores?
- ¿Tiene áreas exteriores para personas que quieran pasar tiempo al aire libre?
- ¿Se les permite a los residentes tomar decisiones acerca de su rutina diaria, como por ejemplo, cuándo irse a dormir, levantarse, bañarse o comer?
- ¿Se permite tener artículos y muebles personales en las habitaciones?
- El personal que allí labora, ¿es amable, considerado y útil?
- ¿Existe un ambiente amistoso y hogareño?
Luego de hacer un ejercicio exhaustivo de evaluación y comparación entre varias instituciones, estarás listo para tomar le mejor decisión. Recuerda que la participación de la familia nunca debe terminar cuando tu ser querido entra al hogar de cuidado. Simplemente, se asume un nuevo papel asegurándose de que otras personas proporcionen un cuidado adecuado a esa persona que tanto amas, siempre respetando su dignidad e independencia aunque necesite apoyo. Busca más información de apoyo a los cuidadores visitando aarp.org/pr.