¿Quieres que tu hijo coma saludable y no sabes cómo lograrlo? Hay niños que dicen que no les gusta alguna comida solo por su aspecto. Tal vez tenga un color que no le guste, una forma peculiar o hasta huela de alguna manera rara para ellos. Trata de enseñarle a comer saludable disfrazando los alimentos. Por ejemplo:
- Papitas – Si a tu hijo le encantan las papitas, consigue las bolsitas de las que son horneadas. En el caso de las papitas fritas, compra las que puedes cocinar en el horno en vez de freír.
- Frutas – Consigue las frutas secas en pequeñas bolsas con dibujos de muñecos. A lo mejor le guste más el aspecto de estas que de las naturales. Otra opción es cortar diferentes frutas en trocitos y ponerlas en un palito de madera de los que se usan para hacer pinchos. Esta forma le resultará divertida.
- Batidos – Quizás tu hijo sólo come guineo pero si lo mezclas con manzana, papaya, fresa, uvas, china o cualquier otra fruta y haces un batido de jugo natural, puede que le guste. Procura añadir más guineo para que su sabor predomine. Puedes agregar un yogur para obtener más proteínas y calcio.
- Sándwich – Prepárale un emparedado de jamón y queso con dos rebanadas de pan integral. Córtalas en alguna forma geométrica, añádeles ojos, nariz y boca con el mismo queso o jamón para hacerlo atractivo.